Jabón de Avena y Miel.


El 	jabón de avena y miel posee propiedades dermatológicas 	que aportan excelentes beneficios a la piel en general.
Jabón de avena y miel.



Jabón de avena y miel. 

 
 

Este jabón es ideal para cualquier tipo de pieles, incluso las más sensibles o atópicas. 

 La avena calma la irritación de la piel, la hidrata y la suaviza y la miel tiene también propiedades hidratantes. Elimina las impurezas de la piel, ya que la miel tiene propiedades humectantes y la avena aporta una ligera exfoliación. Es perfecto para usarlo como desmaquillante.  

 

Tu piel estará visiblemente más luminosa. Simplemente extendiéndolo por la cara formará una película de espuma que, dejándolo unos pocos segundos, cuando te aclares notarás una ligera sensación de tirantez en la piel, eso es un indicativo de limpieza, al instante desaparecerá y tu piel quedará luminosa. Merece mucho la pena probarlo. 
 

Beneficios: 

 

   El  jabón de avena y miel posee propiedades dermatológicas  que aportan excelentes beneficios a la piel en general.  

  Mediante su aplicación se exfolia y limpia intensamente los poros y capas de la piel.  

  Absorbe  la suciedad y limpia profundamente los poros de la piel, estimulando el crecimiento de nuevas células. 

  La  variedad de proteínas que contiene hace que se mantenga el PH de la piel. Funciona como neutro, manteniendo el PH 5,5.  

    El alto contenido en fósforo de estos ingredientes ofrece suavidad.  

 Además  ablanda durezas y las inflamaciones en el caso que  existan. 

 Si tu piel es grasa, el jabón de avena y miel es perfecto para poner fin a ese problema. 

  En caso de sufrir de varicela es uno de los más indicados para aliviar y refrescar la zona afectada. 

 

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