Jabón de Limón



El jabón de limón no solo es un producto muy aromático para nuestro baño, sino que es extremadamente beneficioso para nuestra piel.
Jabón de Limón


El jabón de limón no solo es un producto muy aromático para nuestro baño, sino que es extremadamente beneficioso para nuestra piel.

Es un producto perfecto para la piel sensible y grasa, pues cuenta con propiedades astringentes que dejan la piel libre de cualquier impureza.

Además, es un desinfectante muy efectivo, en especial para tratar los brotes de acné.

No solo le aporta un delicioso aroma cítrico, sino que lo dota de propiedades increíbles para beneficio de nuestra piel.

¿Para qué sirve?

El uso de este jabón aporta numerosos beneficios a tu piel. 

Para el exceso de grasa:

Limpia en profundidad tu dermis, elimina el acné o controla el exceso de grasa.

Sus propiedades astringentes liberan tu cutis de cualquier exceso de grasa y célula muerta que pueda obstruir tus poros.

Para pieles sensibles:

Si escoges el jabón con base de glicerina, disfrutarás de un producto desinfectante, astringente y nutritivo para la piel.

Además, estas propiedades puedes controlarlas al elaborar este jabón en casa, pues podrás agregar los ingredientes que desees.


Para brotes de acné:

Sus propiedades antisépticas, astringentes y desinfectantes te ayudarán a controlar los problemas de puntos negros, acné y espinillas.


Para las manchas de la piel:

El limón tiene la capacidad de reducir las decoloraciones y las manchas en la piel, es decir, tiene la capacidad de nivelar el tono de tu piel.


¿Cómo elaborarlo en casa?

Elaborar este jabón en casa es muy sencillo, solo necesitarás:

10 gotas de aceite esencial de limón.


150 ml de agua.
350 ml de aceite de oliva virgen extra.


50 ml de sosa cáustica.

Cápsulas de vitamina E.

Medio limón cortado en finas rodajas

.
Ralladura de un limón.

Pon a calentar el agua y agrega el medio limón en rodajas, cuando hierva aparta del fuego y deja enfriar y retira las rodajas de limón. Añade poco a poco la sosa caustica, asegúrate de hacerlo en un lugar ventilado, utilizar lentes de seguridad, guantes y mascarilla.

Reserva la mezcla para que enfríe. Mientras, pon a calentar el aceite de oliva hasta que alcance la temperatura de la sosa. Añade el aceite a la mezcla de sosa y bate con ayuda de una batidora o a mano. Cuando la mezcla espese, agrega el aceite esencial de limón.

Añade luego la ralladura de limón, reserva un poco para decorar la parte externa del jabón, si lo deseas, unta el molde con un poco de aceite de oliva y rocía un poco de ralladura sobre el molde.

Agrega el líquido de las capsulas de vitamina E cuando la mezcla del jabón esté fría, remueve un poco y vierte la mezcla en el molde, espolvorea la parte superior con ralladura y deja endurecer.

Deja endurecer por 48 horas y luego desmolda. Corta el jabón en barras y envuélvelas en una toalla limpia y vieja. Deja saponificar en un lugar oscuro y fresco. Recuerda dar vuelta a los jabones cada dos días para que endurezcan bien.

Otra receta de jabón de limón es la siguiente:

  • 1 Jabón de glicerina pura

  • Zumo de limón de 5 limones.

  • Ralladura de 2 limones.
    Derrite el jabón de glicerina a baño de maría, no dejes que hierva. Agrega el jugo del limón y la ralladura, mezcla bien. 
    Vierte la mezcla en los moldes para jabón y deja endurecer. Cuando estén firmes estarán listos para ser utilizados.

¿Cómo se utiliza?

El jabón de glicerina se puede utilizar por las noches, debes aplicarlo después de haber utilizado un jabón de limpieza profunda. Recuerda utilizarlo todos los días para igualar el tono de la piel. 

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